EVALUACIÓN DEL SOFTWARE

Evaluar… Asegura Tyler que la evaluación es una instancia que establece en qué medida se han alcanzado los objetivos establecidos inicialmente,  en la actualidad ese concepto no ha cambiado mucho,  sin embargo, hoy la evaluación no es una finalidad,  sino un medio de perfeccionamiento y mejora constante que supone una instancia de valoración, análisis, recapitulación y cambio en caso de encontrarse aspectos que lo requieran.


Al referirnos al diseño, construcción  e implementación de software,  evaluar implica conocer los esquemas necesarios para realizar una evaluación de software objetiva que mida el grado de efectividad de una aplicación desde varios parámetros, revisar los elementos que componen el desarrollo de dicha aplicación, fortalecer y conocer las directrices que existen internacionalmente para garantizar el desarrollo de Software de calidad.


Evaluar, con respecto al software evaluar requiere analizar el producto sin terminar, analizar el producto terminado, poner a prueba, tocar los límites, saturar el sistema, ponerlo en situaciones críticas, evaluarlo, revisarlo, probarlo una y otra vez. Probarlo antes de sacarlo al mercado, probarlo después de sacarlo al mercado con los primeros clientes, escuchar las sugerencias de sus primeros usuarios, sus quejas y molestias, escuchar los beneficios encontrados  desde la voz de los clientes, de los usuarios finales. Evaluar deja de ser una tarea dentro del proceso, para convertirse en la única tarea permanente antes y después de la creación y puesta en marcha del producto. Un producto que estará beneficiando a muchos usuarios que serán finalmente parte de la solución y de la evaluación.


El desarrollo de cualquier programa pretende siempre  compensar una necesidad planteada por un cliente, o la necesidad evidenciada en un gran grupo de personas.  Pero ¿cuál es la manera de saber si el producto terminado es  justamente  lo que el cliente pidió, o lo que el cliente necesita? y ¿cómo se  puede  estar seguro, que el software  que ha sido construido va a funcionar correctamente? Todo esto se responde con la evaluación del software, evaluación que deberá hacerse a medida que se va construyendo. Por lo tanto, se hace necesario llevar a cabo, en paralelo al proceso de desarrollo, incluso desde el diseño y hasta la implementación,  un proceso de evaluación o confirmación de los distintos productos o modelos que se van generando, en el que participarán desarrolladores, diseñadores,  clientes y usuarios finales, porque no siempre el cliente es el directo usuario final, como es el caso del software educativo, en donde el cliente no es el alumno que usa el programa, pero el alumno sí es el usuario final del mismo y el directo beneficiado. Esta evaluación permanente e interdisciplinaria dará como resultado un mejor producto, aumentando de manera significativa la satisfacción del usuario final, del cliente y por supuesto de los desarrolladores, que esperan siempre lo mejor de su producto.

Jhurney Sánchez